Ser fiador para un alquiler comercial casi le cuesta el divorcio, la estabilidad emocional y pérdidas económicas
Alquileres comerciales también necesitan ser regulados
Por Yamalie Rosario
El Inmobiliario
SANTO DOMINGO.-Ser fiador solidario para un alquiler comercial fue una trampa que casi le costó el divorcio, creó un conflicto entre hermanos, inestabilidad emocional, pérdidas económicas e incluso, la amenaza de que su negocio y parte de su patrimonio fueran embargados.
Marcos, cuyo nombre es ficticio, es un empresario de clase media alta, residente en Santo Domingo, que logró estabilidad económica junto a su esposa Carolyn, quien administra su empresa.
“Emocionalmente nos afectó mucho y más porque fue de parte de su hermano, mi cuñado. Hemos vivido un año y ocho meses de angustias, de mucha tensión, porque nos intimidaban, nos perseguían e incluso en nuestra casa, donde estaban nuestros hijos menores de edad, mandaban a tirar fotos”, relata con gran impotencia Carolyn, quien contó a El Inmobiliario que la litis legal en la que todavía están envueltos ha traído como consecuencia grandes discusiones a la pareja matrimonial.
Ella tuvo que ir a terapia psicológica y él experimentaba insomnio, depresión y hasta tuvo que ir al cardiólogo por taquicardias. Marcos también comenzó a realizar compras compulsivas como forma de drenar los momentos de mayor ansiedad.
Según lo que cuenta Carolyn la pareja ha contratado tres abogados porque los dos primeros profesionales del derecho tenían estancado el caso y en total, entre abonos a la deuda de alquiler y gastos jurídicos han tenido que gastar casi 800 mil pesos.
Su caso tiene cierta complejidad pues el cuñado de Carolyn vendió el punto comercial que tenía, junto a las mercancías y otros bienes que estaban en el local pero cometió el error de dejar el alquiler de ese inmueble a su nombre, confiando en la buena fe de la adquiriente.
Ante los atrasos por pago de alquileres la abogada que tenía a su cargo el arrendamiento comercial comenzó a ejercer presión al fiador, debido a que el deudor principal no tenía dinero ni patrimonio. La abogada hostigó a Marcos al punto de recibir amenazas de embargo y numerosas notificaciones a través de diferentes actos de alguacil.
En este momento el cuñado se fue del país y Carolyn siente que los otros hermanos de su esposo apoyan a su cuñado porque lo ven como una víctima y ellos han quedado como «los malos». Esa reflexión hace Carolyn aunque Marcos le dio trabajo a su hermano en su negocio y sustentó por mucho tiempo gran parte de sus gastos mensuales.
«Tomaban fotografías al negocio a cualquier hora del día. Capturaban fotos a nuestra casa hasta de noche y estando nuestros hijos solos llegaron a ver vehículos estacionados afuera con personas observando la casa. Intentamos negociar pero la abogada no quiso. Quería embargar o que le pagarán todo el costo de los alquileres más intereses», explica.
Abogada dice es necesario regular rentas comerciales
Casos como ese y una demanda existente desde el 2013 por un alquiler comercial cuya litis ha impedido que el propietario y el inquilino utilicen el inmueble y el consorcio de propietarios están siendo perjudicados porque la cuota de mantenimiento no se paga por ese lapso de tiempo, 10 años, hacen reflexionar a la abogada Inmobiliaria, Ana Bello, de que se necesita que en la demandada ley de Alquileres sean reguladas también las rentas comerciales.
«La Ley de Alquileres necesita una modificación integral que incluya no solamente las rentas cortas, sino que se regule los aspectos de rentas tradicionales o los alquileres de largo plazo, considerando que también hay alquileres comerciales», analizó la profesional del derecho que tiene más de 10 años de experiencia.
Considera que se deben establecer reglas claras que sean respetadas por ambas partes y establecer los plazos para la terminación de los contratos o los lapsos de tiempo anticipados con que los inquilinos deben notificar la terminación de los contratos de arrendamientos.
Además, entiende que deben establecerse penalidades en caso de una terminación anticipada de un contrato de alquiler y otras violaciones.
Tomando como ejemplo el caso de Carolyn y su esposo Marcos, Bello sostiene que se dan situaciones en las que los fiadores solidarios desconocen el estado de las deudas de los inquilinos. En esos casos sugiere que los contratos establezcan topes de crédito para que el fiador pueda corregír cualquier situación a tiempo y ponerse de acuerdo con el deudor principal.
Lamenta que la legislación actual es muy antigua y necesita ser actualizada acorde con las demandas de los tiempos actuales.
Bello manifestó que la normativa de alquileres no debe centrarse en rentas habitacionales porque existen actividades de negocios importantes a través de la renta de locales comerciales, por lo que ese tema necesita otro abordaje.